
UAGA realizará, junto con los cotos de caza, un decálogo de buenas prácticas para la reclamación de daños cinegéticos
La semana pasada UAGA asistió a una reunión de Diputación con los cotos de caza, en la que se pusieron sobre la mesa las dificultades existentes. El principal problema de la caza, en general, es la falta de relevo generacional. La ausencia de incorporación de jóvenes a esta práctica va a suponer, en un corto período de tiempo, un serio problema en el control de especies de caza mayor, tanto para la Diputación como para los propios cazadores y para la sociedad, en general. Por ello, se abogó por trabajar de manera conjunta en la búsqueda de soluciones.
Con respecto a las demandas de los cazadores, se abordó la necesidad de cambios legislativos, tanto en lo relativo a la responsabilidad por daños, en una posible declaración como actividad esencial o la flexibilización para incorporar jóvenes a la actividad de manera más sencilla. También se pidió desarrollar mecanismos para articular subvenciones que puedan dar solución a los daños, así como acciones para mejorar la imagen social de la caza.
Para poder avanzar en estos asuntos, los cazadores se comprometieron a recoger una estadística real de lo que verdaderamente suponen las indemnizaciones por daños producidos por las especies cinegéticas en Álava, con detalle de cantidades abonadas, tipo de cultivo afectado y localización de las zonas conflictivas. Asimismo, se acordó elaborar un censo de perros de caza por cuadrillas y una recopilación de los gastos que supone el mantenimiento de las rehalas.
Además, UAGA y los cazadores se han comprometido a elaborar un decálogo de buenas prácticas para efectuar las reclamaciones de daños producidos por las especies cinegéticas, donde se recoja aspectos la forma de canalizar las quejas, los periodos de reclamación y la necesidad de hacer tasaciones conjuntas.